Los comederos slow food son comederos antideglución, es decir, que están diseñados para reducir la velocidad de ingesta de la comida. 
 
Son ideales para aquellos perros que comen demasiado rápido, ayudandóles a ingerir la comida de manera más gradual. De este modo ayuda a prevenir posibles problemas derivados de una excesiva voracidad, como por ejemplo atiborramientos y trastornos gastrointestinales. 
 
Además de evitar que tu perro engulla la comida, incentivará el esfuerzo y mantendrá su mente activa al tener que buscar la forma de acabarse toda la comida. 
 
Está equipado con bordes de goma antideslizante y no contiene BPA (bisfenol).